Una nueva era en la implantología dental
La implantología guiada 3D ha revolucionado la forma en que se colocan los implantes dentales. Gracias a la tecnología digital, hoy es posible planificar toda la cirugía de forma virtual antes de realizarla, reduciendo los márgenes de error y garantizando resultados más predecibles. A través de escáneres intraorales y tomografías 3D, se obtiene una imagen precisa de la boca y el hueso del paciente, lo que permite planificar con exactitud la posición, el ángulo y la profundidad de cada implante.
Planificación digital milimétrica
El proceso comienza con la toma de registros digitales del paciente. A partir de esa información, el equipo odontológico crea una guía quirúrgica personalizada que servirá como referencia durante la intervención. Este método permite realizar cirugías mínimamente invasivas, sin incisiones innecesarias y con una precisión imposible de lograr con técnicas tradicionales. Además, la planificación digital reduce los tiempos de la cirugía y mejora la experiencia del paciente.
Menos molestias, más precisión
Gracias a esta tecnología, el paciente disfruta de un postoperatorio mucho más cómodo. Al minimizar la manipulación de los tejidos, se reduce la inflamación, el sangrado y el dolor. En muchos casos, el procedimiento puede realizarse incluso sin puntos de sutura. Todo esto se traduce en una recuperación más rápida y segura, con resultados altamente estéticos y funcionales.
Tecnología y estética al servicio de tu sonrisa
El objetivo final no es solo recuperar la función dental, sino también devolver la armonía estética de la sonrisa. La implantología guiada 3D permite elegir con precisión la posición y el tipo de implante más adecuado, de modo que la prótesis final encaje de forma perfecta con el resto de la dentadura y con los rasgos faciales del paciente. El resultado es una sonrisa natural, equilibrada y duradera.
La confianza de saber que estás en buenas manos
Optar por un tratamiento de implantología guiada 3D significa apostar por la tecnología, la precisión y la seguridad. Cada detalle está planificado de antemano, y el paciente puede visualizar los resultados antes de la intervención. Es la manera más segura de recuperar la sonrisa con total confianza.